JACINTO RIVERO, GRABADOR DE LAS IMÁGENES COTIDIANAS DEL PARAGUAY. SUS INICIOS EN LA TÉCNICA DEL GRABADO
** La vida de grabador de Jacinto Rivero se inició con el renacimiento del grabado en el Paraguay, es decir con la fundación del Taller "Julián de la Herrería" por el Maestro Livio Abramo.
** Corría el año 1956 y hasta ese entonces, en el ámbito artístico no se conocía la técnica del xilograbado, salvo por los que se habían hecho en las Misiones Jesuíticas y los grabados de los periódicos de la guerra del 70, a los que todavía en aquel entonces no se les daba la debida importancia, En el año 1920 Andrés Campo Cervera realizó una muestra en el Belvedere, en la que se incluían, además de pintura, algunos grabados. Nos cuenta Doña Josefina Plá: “A partir de esta fecha, varios lustros transcurrieron jalonados por esporádicas expresiones del artista en xilograbados ilustrativos, y algunos de la misma milenaria técnica, firmados por Julio Vergottini (argentino de paso) y por el entonces muy joven pintor, Roberto Holdenjara. Nada que señalase superaciones en la autoría. Ya en España en 1934, Julián de la Herrería, realizo una nueva serie de grabados en metal" Es comprensible, por lo tanto el entusiasmo que despertó, la apertura del Taller de grabado en los jóvenes ligados al ámbito artístico y cultural de Asunción. Sigue diciendo Doña Josefina Plá, en la presentación de la exposición de 1994 de Jacinto Rivero: "El anuncio de la apertura del Taller fue la consigna para la incorporación de un grupo numeroso de jóvenes noveles, acompañados de otros ya en marcha hacia una definida personalidad como pintores. Rodearon entusiastas al Maestro: dieron vida y savia a esa iniciativa, que nos permite contar hoy con varios logrados grabadores". La misma Doña Josefina hizo xilografías y linograbados entre 1927 y 1929, bajo el seudónimo de "Abel de la Cruz".
** Las propias palabras de Livio Abramo certifican los comienzos del artista. En septiembre de 1989, en la presentación de la exposición de un grupo de grabadores del Centro de Estudios Brasileños, Livio escribió:"De esta última institución (Centro de Estudios Brasileños) provienen, por ejemplo Jacinto Rivero, el decano del grupo, que hizo parte del primer Curso de Grabado "Julián de la Herrería" (constituido originalmente por 62 personas), inaugurado por quien escribe, en Agosto- Septiembre de 1956"
** Del grupo inicial del Taller, Jacinto era el único que no estaba relacionado de ninguna forma con el arte ni la sociedad cultural asuncena. Era un obrero, presumiblemente pintor de brocha gorda entre otros trabajos esporádicos que realizaba. Vivía en el Barrio Roberto L. Petit, cerca del cerro Lambaré. Todas las tardecitas se dirigía a pie hasta la sede del Instituto Cultural de la Embajada del Brasil que se encontraba en las calles Mariscal Estigarribia y Brasil. Era un alumno muy constante, pocas veces se ausentaba y era muy entusiasta.
** El Maestro Abramo reconoció tempranamente el potencial de Jacinto. Entre ambos nació una gran amistad, una relación controvertida, nos cuenta Fabiola Adam; "la relación con el Maestro realmente era una relación de amor y odio, yo creo que el Maestro Livio lo consideraba a Jacinto el mejor grabador paraguayo ... Admiraba muchas cosas de Jacinto, su manera de ser, su fuerza, esa facilidad de fijar imágenes, ese mundo prolífico que él tenía y sobre todo esa libertad interna que tenía Jacinto, y por todo esto le tenía un gran amor y esa gran paciencia ......
Para leer el texto completo visitar: TÉSIS en el ISA (Noviembre 2007) de BARRAIL, ROSMARY: JACINTO RIVERO, GRABADOR DE LAS IMÁGENES COTIDIANAS DEL PARAGUAY SUS INICIOS EN LA TÉCNICA DEL GRABADO. Fuente: PUBLICACIONES 2008. CARRERA DE ARTES VISUALES – ISA. FACULTAD DE ARQUITECTURA, DISEÑO Y ARTE, UNIVERSIDAD NACIONAL DE ASUNCIÓN.
** La vida de grabador de Jacinto Rivero se inició con el renacimiento del grabado en el Paraguay, es decir con la fundación del Taller "Julián de la Herrería" por el Maestro Livio Abramo.
** Corría el año 1956 y hasta ese entonces, en el ámbito artístico no se conocía la técnica del xilograbado, salvo por los que se habían hecho en las Misiones Jesuíticas y los grabados de los periódicos de la guerra del 70, a los que todavía en aquel entonces no se les daba la debida importancia, En el año 1920 Andrés Campo Cervera realizó una muestra en el Belvedere, en la que se incluían, además de pintura, algunos grabados. Nos cuenta Doña Josefina Plá: “A partir de esta fecha, varios lustros transcurrieron jalonados por esporádicas expresiones del artista en xilograbados ilustrativos, y algunos de la misma milenaria técnica, firmados por Julio Vergottini (argentino de paso) y por el entonces muy joven pintor, Roberto Holdenjara. Nada que señalase superaciones en la autoría. Ya en España en 1934, Julián de la Herrería, realizo una nueva serie de grabados en metal" Es comprensible, por lo tanto el entusiasmo que despertó, la apertura del Taller de grabado en los jóvenes ligados al ámbito artístico y cultural de Asunción. Sigue diciendo Doña Josefina Plá, en la presentación de la exposición de 1994 de Jacinto Rivero: "El anuncio de la apertura del Taller fue la consigna para la incorporación de un grupo numeroso de jóvenes noveles, acompañados de otros ya en marcha hacia una definida personalidad como pintores. Rodearon entusiastas al Maestro: dieron vida y savia a esa iniciativa, que nos permite contar hoy con varios logrados grabadores". La misma Doña Josefina hizo xilografías y linograbados entre 1927 y 1929, bajo el seudónimo de "Abel de la Cruz".
** Las propias palabras de Livio Abramo certifican los comienzos del artista. En septiembre de 1989, en la presentación de la exposición de un grupo de grabadores del Centro de Estudios Brasileños, Livio escribió:"De esta última institución (Centro de Estudios Brasileños) provienen, por ejemplo Jacinto Rivero, el decano del grupo, que hizo parte del primer Curso de Grabado "Julián de la Herrería" (constituido originalmente por 62 personas), inaugurado por quien escribe, en Agosto- Septiembre de 1956"
** Del grupo inicial del Taller, Jacinto era el único que no estaba relacionado de ninguna forma con el arte ni la sociedad cultural asuncena. Era un obrero, presumiblemente pintor de brocha gorda entre otros trabajos esporádicos que realizaba. Vivía en el Barrio Roberto L. Petit, cerca del cerro Lambaré. Todas las tardecitas se dirigía a pie hasta la sede del Instituto Cultural de la Embajada del Brasil que se encontraba en las calles Mariscal Estigarribia y Brasil. Era un alumno muy constante, pocas veces se ausentaba y era muy entusiasta.
** El Maestro Abramo reconoció tempranamente el potencial de Jacinto. Entre ambos nació una gran amistad, una relación controvertida, nos cuenta Fabiola Adam; "la relación con el Maestro realmente era una relación de amor y odio, yo creo que el Maestro Livio lo consideraba a Jacinto el mejor grabador paraguayo ... Admiraba muchas cosas de Jacinto, su manera de ser, su fuerza, esa facilidad de fijar imágenes, ese mundo prolífico que él tenía y sobre todo esa libertad interna que tenía Jacinto, y por todo esto le tenía un gran amor y esa gran paciencia ......
Para leer el texto completo visitar: TÉSIS en el ISA (Noviembre 2007) de BARRAIL, ROSMARY: JACINTO RIVERO, GRABADOR DE LAS IMÁGENES COTIDIANAS DEL PARAGUAY SUS INICIOS EN LA TÉCNICA DEL GRABADO. Fuente: PUBLICACIONES 2008. CARRERA DE ARTES VISUALES – ISA. FACULTAD DE ARQUITECTURA, DISEÑO Y ARTE, UNIVERSIDAD NACIONAL DE ASUNCIÓN.
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